A petición de una persona muy querida por mi, voy a poner la receta de las galletas de mantequilla. Va dedicada a ti "ahijada Elena" .. por todo el interés que has puesto hasta conseguirla (aunque fuera la 1,00 h. de la madrugada, jejejeje). Las hice para estas Navidades 2012-2013 por eso, sus formas y sus colores tan chulos.. pero podemos hacerlas en cualquier época del año.. los moldes para las galletas, ya los venden en cualquier sitio. Yo compré un set muy majo en IKEA. (un poco de publicidad se puede, no??? )
INGREDIENTES
200 g. mantequilla
150 g. azúcar glass
350 g. harina
1 huevo
Esencia de Vainilla ó canela, chocolate .... (al gusto)
Cogemos la mantequilla, que tiene que estar a temperatura ambiente (si hay prisas, la ponemos unos segundos en el micro). La mezclamos con el resto de ingredientes hasta que queden integrados perfectamente. La vamos amasando con las manos hasta que no se nos quede pegada en los dedos.
Hacemos una bola con ella y la partimos por la mitad (con 2 es mas manejable), las tapamos con papel film, bien cerradito (como si fuera un caramelo, que no le entre aire) y metemos al frigorífico como mínimo 1 hora.
Ponemos el horno, a 180º, calor arriba y abajo.
Pasado ese tiempo, sacamos una de las bolas de masa del frigorífico, ponemos un papel de hornear por encima para que no se quede pegado, y con un rodillo empezamos a estirarlo. Lo ideal, es dejar la masa a medio centímetros por todos los lados, pensad que si lo dejamos muy fino, se nos quemaría enseguida y más gruesa, se nos quedaría un poco crudas.
Una vez estirada, cortamos las figuras con nuestros moldes. En la bandeja del horno, ponemos un papel para hornear y las vamos colocando (dejar un poco de separación entre ellas, porque tienen que crecer un poco). Los pedacitos que nos quedan cuando las cortamos los volvemos a juntar y amasamos de nuevo para hacer mas galletas.
Las metemos al horno durante 10 minutos más ó menos, pero para estar más seguros de cuándo sacarlas, tenemos que ver que los bordes han tomado colorcillo. (Aunque te parezca que pueden estar crudas por dentro, es su punto ideal). Sacamos la bandeja del horno, y las dejamos unos minutos en la misma. Con el mismo calor que tiene, se terminan de hacer y se enfrían un poco.
MUY IMPORTANTE: NO TOQUES LAS GALLETAS RECIÉN SACADAS DEL HORNO, PORQUE SON MUY FRÁGILES Y SE PUEDEN ROMPER.
Cuando las podamos tocar, las pasamos a la rejilla del horno, sin papel para que les entre aire, se terminen de enfriar y se vayan poniendo un poquitín más duras. Mientras se enfrían podemos ir haciendo más galletas (aún nos queda otra bola).
Podemos echarlas ahora un poco de azúcar glass por encima, pero si queremos decorarlas con glasa real, debemos esperar a que estén totalmente frías. Para eso, esperamos al día siguiente. Las guardamos en una caja de metal ó en mi caso, en un tupper para que no les de el aire.
Al siguiente día, hacemos la glasa real, para ello necesitaremos los siguientes ingredientes:
GLASA REAL
330 g. azúcar glass (3 tazas +-)
2 claras de huevo
2 cucharatidas de zumo de limón (no le da mucho sabor, si no os gusta el limón)
Colorantes
Batimos las claras con la batidora. No hace falta mucho, tienen que estar un poco espumosas. Agregamos el limón y vamos echando el azúcar glass cucharada a cucharada sin dejar de batir.
GLASA PARA DELINEAR
Esta glasa es la que conseguimos partiendo de los pasos seguidos anteriormente. Es un poco más espesa, para hacer los bordes de las galletas, para luego rellenarlas con otra más ligera. La consistencia necesaria para utilizarla, es, cuando al separar la batidora, no se cae la glasa. Si vemos que está un poco líquida, vamos echando más azúcar y batiendo, hasta conseguirlo.
Ponemos un poco de glasa en un bol pequeño, y la tintamos con los colorantes (cuidado con estos) Hay que empezar poco a poco con los colores, añadiendo de poquito a poquito hasta conseguir los colores deseados. (si nos hemos pasado, siempre podemos añadir un poco mas de glasa blanca). Una vez conseguido, separamos la que vamos a utilizar para delinear y la que vamos a usar para para rellenar (bien tapado con film, para que no se quede dura). Metemos las de delinear en mangas pasteleras, bien cerraditas (hasta que vayamos a utilizarlas). Cogemos nuestras galletas y las vamos haciendo los bordes (nos podemos ayudar de un palillo de dientes por si nos pasamos). Para poder rellenarlas, tienen que estar las lineas totalmente secas y duras.
GLASA DE RELLENO
Una vez secos los bordes, vamos a rellenarlas. Para eso cogemos el bol con la glasa que habíamos separado con el tinte elegido y vamos a aligar la glasa para que se quede más líquida. Para ello vamos echando cucharitas de agua (una a una) y removiendo. El punto correcto, es cuando levantamos la cucharita, dejamos caer la glasa, contamos 5 segundos y desaparecen todos los surcos que se han formado.
"He de confesaros, que el tema de decorar las galletas necesita un poco de práctica. Yo lo que hice a mis galletas, fue hacer la glasa espesa para los bordes y hacerla un poquito mas ligera con agua (como si fuera para relleno, pero no tan liquida). Eché un poco en medio de las galletas y la extendí con la ayuda de una cucharita, retocando con unos palillos. Una vez seca la primera capa, me dedique a decorarlas con mucha paciencia de la misma manera... Cuando consiga coger práctica, lo intentaré de nuevo con todos los pasos.. Pero aún a mi manera, quedaron preciosas y buenísimas.. "